"No mires a los hombres que están detrás de la cortina"
Transcripción de la tercera parte de la película Zeitgeist
“Detrás del trono hay algo más grande que el Rey mismo”.
"El mundo está gobernado por personajes muy distintos de lo que imaginan los que no están detrás de la escena”.
“La verdad es que los grandes centros financieros son los dueño del gobierno desde los días de Andrew Jackson.
En 1775, la guerra de independencia norteamericana comenzó cuando las colonias norteamericanas trataron de liberarse de Inglaterra y de su monarquía represiva. Aunque hubo muchas razones para esta revolución, una en particular sobresale como la causa primordial: el Rey George III de Inglaterra prohibió la moneda sin interés que las colonias estaban produciendo y usando independientemente, forzando a los colonos a pedir dinero con interés al Banco Central Inglés, provocando así el endeudamiento de las colonias.
Como después dijo Benjamín Franklin:
"La negativa del Rey George III de permitir a las colonias crear un sistema monetario honesto, que liberaría al hombre ordinario de las resortes de los manipuladores de dinero, fue probablemente la causa primordial de la revolución norteamericana."
En 1783, Norteamérica conquistó su independencia de Inglaterra. Sin embargo, su batalla
contra el concepto de Banco Central y contra los hombres corruptos y avariciosos asociados con él, no había hecho más que comenzar.
¿Qué es un Banco Central? Un Banco Central es una institución que produce la moneda de una nación entera.
Basándonos en los precedentes históricos vemos que existen dos poderes específicos intrínsecos al funcionamiento del Banco Central:
Uno, el control de las tasas de interés y dos, el control del suministro de dinero, o inflación.
El Banco Central no sólo provee de dinero a la economía de un Gobierno, sino que se lo presta con interés. De esta forma, aumentando o disminuyendo el suministro de dinero, el Banco Central regula el valor de la moneda emitida.
Es crucial entender que la estructura entera de este sistema sólo puede producir una cosa a largo plazo: deuda. No se necesita demasiado ingenio para entender esta estafa. Veámoslo: Cada dólar producido por el Banco Central es prestado con interés.
Esto significa que cada dólar producido es realmente un dólar más un cierto porcentaje de deuda basado en ese dólar. Si es el Banco Central quien tiene el monopolio sobre la producción de la moneda del país entero, y si es el Banco Central el que presta cada dólar con una deuda asociada a él (el interés), ¿de dónde sale el dinero para pagar esta deuda? Sólo puede venir nuevamente del Banco Central. Lo que significa que el Banco Central tiene que incrementar constantemente su suministro de dinero para cubrir temporalmente la deuda pendiente creada. Y puesto que ese nuevo dinero es también prestado con interés, ¡la deuda no hace más que aumentar!
El resultado final de este sistema implacable es la esclavitud. Porque el Gobierno y los ciudadanos no pueden salir nunca de esta deuda auto-generada.
Los padres fundadores de este país (USA) fueron muy conscientes de esto.
"Creo que las instituciones bancarias son más peligrosas que los ejércitos. Si el pueblo americano alguna vez permite a los bancos privados controlar la emisión de moneda, los bancos y las corporaciones que crecerán alrededor de ellos privarán al pueblo de su propiedad hasta que sus hijos despierten sin casa en el continente que sus padres conquistaron.
Thomas Jefferson, 1745-1826
"Si quieren seguir siendo esclavos de los banqueros y pagar por el costo de su propia esclavitud, permítanles continuar creando el dinero y controlando el crédito de la nación”.
Sir Josiah Stamp
A principios del siglo XX, los EEUU habían conseguido eliminar algunas funciones del Banco Central, que habían creado grandes estafas a través de intereses bancarios desmesurados.
En esa época, las familias que controlaban los bancos y los negocios del mundo eran los Rockefeller, los Morgan, los Warburg, los Rothchild...
A principios de 1900, estas familias intentaron que se aprobaran leyes para crear otro Banco Central. Sin embargo, sabían que el gobierno y el público desconfiaban de una institución así, por lo que se vieron en la necesidad de crear un incidente con el fin de influir en la opinión pública.
J.P.Morgan, considerado públicamente como un experto financiero de la época, aprovechó su enorme influencia para difundir rumores sobre la insolvencia o la inminente quiebra de un banco prominente de New York. Morgan sabía que esto causaría una histeria masiva que también afectaría otros bancos. Y así fue.
La población, temiendo perder sus depósitos, comenzó a retirar masivamente su dinero de los bancos. Consecuentemente, los bancos fueron forzados a reclamar sus préstamos, obligando a los endeudados a vender sus productos. Y así comenzó una espiral de quiebras, reapropiaciones y desorden.
Unos años más tarde, tratando de poner las piezas en orden, Fredrik Allen escribió en la revista Life:
“Los intereses de la banca Morgan generaron el pánico de 1907 y astutamente lo canalizaron mientras se produjo."
Sin ser consciente del fraude que se había cometido, el Congreso de los EEUU inició una investigación parlamentaria sobre la crisis de 1907, a cargo de la cual fue designado el senador Nelson Aldrich, quien curiosamente mantenía lazos íntimos con los cárteles bancarios, y quien más tarde pasó a formar parte, mediante casamiento, de la familia Rockefeller.
La comisión dirigida por Aldrich aconsejó la creación de un Banco Central con el fin de evitar que una crisis como la de 1907 volviera a suceder. Esta fue la chispa que los banqueros internacionales necesitaban para iniciar su plan.
En 1910, hubo una reunión secreta en la propiedad de J.P.Morgan en la Jekyll Island, en las costas de Georgia. Fue ahí donde se redactó la ley del Banco Central, llamada Acta de la Reserva Federal. Esta ley fue redactada por los banqueros, no por los legisladores. Esta reunión fue tan secreta, tan oculta al conocimiento del Gobierno y de la población, que las diez personas que formaron parte de ella camuflaron sus nombres cuando salieron de la isla.
Una vez redactada, esta ley fue entregada a una figura política, el senador Nelson Aldrich, para que la introdujera en el Congreso. En 1913, con un fuerte apoyo de los banqueros, Woodrow Wilson fue elegido presidente de los EEUU, después de que hubiera aceptado firmar el Acta de la Reserva Federal a cambio del apoyo de los banqueros a su campaña.
Dos días antes de Navidad, cuando la mayor parte de los congresistas ya estaba en casa con sus familias, el Acta de la Reserva Federal fue aprobada por el Congreso. Y Wilson convirtió el Acta en Ley. Años después, arrepentido, W. Wilson escribió:
"Nuestra gran nación industrial está controlada por un sistema de crédito. Nuestro sistema de crédito está concentrado en manos privadas. El crecimiento de la nación y, por consiguiente, de todas nuestras actividades está en las manos de unos pocos hombres quienes, necesariamente o por motivos de sus propias limitaciones, congelan,
frenan y destruyen la genuina libertad económica. Nos hemos transformado en una de las naciones peor gobernadas, en una de las naciones más controladas y dominadas del mundo civilizado. Ya no somos una nación de libre opinión, no somos una nación basada en la fe y en el voto de la mayoría, sino una nación en la que predomina la opinión y la coacción de un pequeño grupo de hombres todopoderosos”.
El congresista Louis McFadden también expresó la verdad después de que la ley hubiera sido aprobada:
“Un sistema bancario mundial esta siendo puesto a punto en nuestros días, un supra-estado controlado por banqueros internacionales que actúan conjuntamente para esclavizar al mundo en pos de su propio placer. El Banco Central ha usurpado al gobierno."
Al público se le dijo que la Reserva Federal (FED) era un estabilizador económico. Y que la inflación y las crisis económicas eran cosas del pasado. Bueno, como muestra la historia, nada estuvo más lejos de la verdad.
El hecho es que los banqueros internacionales tuvieron una máquina bien ajustada para expandir sus ambiciones personales.
Por ejemplo, de 1914 a 1919, el FED incrementó el suministro de dinero en casi un 100%, traducido en grandes préstamos a los bancos pequeños. En 1920, el FED redujo masivamente el suministro de dinero, forzando así a los pequeños bancos a cancelar su enorme cantidad de préstamos y, como en 1907, hubo hundimientos bancarios, quiebras y el subsiguiente colapso. Más de 54.00 bancos competitivos fuera del FED se hundieron, consolidando más aún el monopolio de un reducido grupo de banqueros internacionales.
Al tanto de este crimen, el congresista Lindbergh se levantó y dijo en 1921:
"Bajo el Acta de la Reserva Federal, los pánicos son creados científicamente. El pánico actual es el primero creado científicamente, y ha sido calculado como se calcula una ecuación matemática."
Sin embargo, el pánico de 1920 fue solo un pre-calentamiento.
De 1921 a 1929 el FED volvió a incrementar el suministro de dinero, en forma de enormes cantidades de préstamos a la población y a los bancos. En esa época surgió un nuevo tipo de préstamo en el mercado bursátil llamado préstamo margen. ¿Qué es un préstamo margen? Muy simple: un préstamo margen permitía al inversor pagar solo el 10% del precio de un título, siendo el otro 90 % prestado por el corredor de bolsa. En otras palabras, una persona podía tener 1.000 $ en títulos solo pagando 100 $. Este método era muy popular en los años 20, cuando todo el mundo parecía estar haciendo dinero en la bolsa. Sin embargo, este préstamo tenía una trampa. Podía ser requerido en cualquier momento y debía ser pagado en 24 horas. Esto se llama un "pedido marginal", y el resultado típico de un pedido marginal es la venta del stock comprado con el préstamo. Unos meses antes de octubre de 1929, J.D. Rockefeller, Bernhard Barack y otros conocedores se retiraron silenciosamente de la bolsa y el 24 de octubre de 1929, los financieros de New York que habían concedido préstamos marginales empezaron a pedirlos en masa. Esto provocó instantáneamente una venta masiva en el mercado, puesto que todos debían cubrir sus préstamos marginales. Esto disparó corrimientos masivos de bancos. Por esta misma razón se hundieron 16.000 bancos, posibilitando a los banqueros internacionales conspiradores no sólo a comprar bancos rivales a precio de ganga, sino también comprar corporaciones completas por menos que nada.
Fue el robo más grande de la historia norteamericana. Pero eso no fue todo. En lugar de aumentar el suministro de dinero con el fin de recuperar este colapso económico, el FED lo redujo, creando una de las más grandes depresiones económica de la historia.
Nuevamente enfadado, el congresista Louis McFadden, un viejo oponente del cártel bancario, comenzó una moción de censura contra el Federal Reserve Board, afirmando que la caída y la depresión económica:
“…Fue una situación cuidadosamente planeada. Los banqueros internacionales generaron un estado de desesperación, para poder resurgir como los dueños de todos nosotros”.
No es sorprendente que después de dos intentos de asesinato, McFadden fuera envenenado en un banquete antes de que pudiera comenzar con la moción de censura.
Habiendo reducido la sociedad a la miseria, los banqueros de la Reserva Federal decidieron que el patrón oro debería ser eliminado. Para hacer esto, necesitaban obtener todo el oro remanente en el sistema. Así que bajo la pretensión de "ayudar a terminar con la depresión", en 1933 se produjo una recuperación masiva del oro. Bajo amenaza de pena de prisión de hasta diez años, todos los norteamericanos fueron exhortados a entregar todo el oro que poseían al Tesoro Público, esto es, esencialmente robaron a la población la poca riqueza que les quedaba.
A finales de 1933, el patrón oro fue abolido. Si miras un billete de dólar de antes de 1933, puedes ver que dice que es convertible en oro. Si miras un billete de dólar actual, podrás ver que dice que es moneda de curso legal, lo que significa que es apoyado por… absolutamente nada. Es papel sin valor. Lo único que le da valor a nuestro dinero es la cantidad que hay en circulación. Por consiguiente, el poder de regular el suministro de dinero es también el poder de regular su valor, que también es el poder para poner las economías y las sociedades enteras de rodillas.
“¡Teniendo el control del suministro de dinero de una nación, me importa un bledo quiénes sean los que hacen las leyes!”.
M.A. Rothschild,
Fundador del Banco Rothchild.
Es importante entender claramente lo siguiente: la Reserva Federal es una corporación privada. Es tan "federal" como "Federal Express". Hace sus propias pólizas y no está sujeta al control del Gobierno. Es un banco privado que presta toda la moneda nacional con interés al mismo Gobierno. Es decir, este es el modelo de Banco Central fraudulento del que el país trató de escapar con la Guerra de Independencia, declarando su independencia del Banco Central Inglés.
Volviendo a 1913, el Acta de la Reserva Federal no fue la única ley anticonstitucional que se mandó al Congreso. También mandaron el impuesto federal por la renta. Vale la pena aclarar que la ignorancia del público americano frente al impuesto federal por la renta es una prueba de lo torpe e inconsciente que es realmente la población norteamericana.
En primer lugar, el impuesto federal por la renta es completamente anti-constitucional, porque es un impuesto directo y no-igualitario. Todos los impuestos directos deben ser igualitarios para ser legales según la Constitución. En segundo lugar, el número requerido de Estados necesarios para ratificar la enmienda que permite el impuesto federal nunca fue alcanzado, y esto ha sido citado incluso en las Cortes Judiciales. En tercer lugar, actualmente este impuesto supone aproximadamente el 35% del ingreso medio de un trabajador. Eso significa que trabajas cuatro meses del año para cumplir con esta obligación impositiva, y… adivina dónde va el dinero. ¡Va destinado a pagar el interés de la moneda producida por el fraudulento Banco de la Reserva Federal! Este sistema no debe existir. El dinero que ganas trabajando cuatro meses del año va literalmente a los bolsillos de los banqueros internacionales, dueños del Banco Privado de la Reserva Federal. Y en cuarto lugar, aún con la afirmación fraudulenta del gobierno sobre la legalidad del impuesto sobre la renta, no hay literalmente ningún estatuto, ni ley que te obligue a pagar este impuesto.
“Realmente esperaba que hubiera una ley que te obligue a presentar el retorno del impuesto. Busqué pero no pude encontrar dicha ley. Así que no tuve más remedio que renunciar. A lo largo de todas las investigaciones que hice durante el año 2000, y que aun estoy haciendo, no encontré esa ley. Pregunté en el Congreso, a un montón de gente, a los ayudantes del Comisionado del IRS y nadie pudo contestarme, porque si contestan, el pueblo americano se va a dar cuenta de que todo este tema es un fraude. No he presentado un impuesto federal sobre la renta desde que renuncié. No he presentado un retorno de impuestos desde 1999”.
El impuesto sobre la renta no es otra cosa que la esclavización del país entero.
El control de la economía y el robo perpetuo de riqueza es sólo un lado del cubo de Rubik que los banqueros tienen en sus manos. Otra herramienta para sus ganancias y control es la guerra.
Desde el origen de la Reserva Federal en 1913, muchas grandes y pequeñas guerras han comenzado. Las tres más conocidas fueron la Primera Guerra Mundial, la Segunda Guerra Mundial, y la guerra de Vietnam.
PRIMERA GUERRA MUNDIAL
En 1914, comenzaron las guerras europeas comenzando por la que entablaron Inglaterra y Alemania. El pueblo americano no quería saber nada de la guerra y el presidente Wilson declaró públicamente la neutralidad de los EEUU. Sin embargo, detrás de las apariencias, la administración americana buscaba alguna excusa para poder entrar en la guerra.
Esta notoria observación fue hecha por el Secretario de Estado William Jennis:
“Los grandes intereses bancarios estaban profundamente interesados en la guerra mundial, debido a las oportunidades de grandes ganancias”.
Es importante entender que el negocio más lucrativo para los banqueros internacionales es la guerra. ¿Por qué? Porque obliga a los países en guerra a pedir más dinero prestado con intereses al Banco de la Reserva Federal.
El principal asesor y mentor de W. Wilson era el Coronel Edward House, un hombre íntimamente ligado a los banqueros internacionales que querían entrar en la guerra.
En una conversación documentada entre el Coronel House, asesor de Wilson y Sir Edward Grey, el Secretario de Asuntos Exteriores de Inglaterra, sobre cómo hacer que América entrara en la guerra, Grey pregunto:
- “¿Qué harían los americanos si los alemanes hundieran un crucero con pasajeros americanos a bordo?”
House respondió: “Creo que una ola de indignación se apoderaría de los EEUU y eso sería suficiente para llevarnos a la guerra”.
El 7 de Mayo de 1915, por sugerencia de Sir Edward Grey, un crucero llamado el Lusitania fue enviado intencionalmente a aguas controladas por Alemania, donde se sabía que había barcos militares alemanes. Y como era de esperar, los barcos U alemanes bombardearon el barco, que explotó debido a las municiones almacenadas en él, matando a 1.200 personas.
Para entender mejor la naturaleza intencional de esta conspiración, la embajada alemana publicó anuncios en el New York Times, diciéndole a la gente que si abordaban el Lusitania lo hicieran a su propio riesgo, porque navegaría desde EEUU a Alemania atravesando zona de guerra y que corría un riesgo serio de ser destruido.
De hecho y como estaba previsto, el hundimiento del Lusitania causó una ola de ira entre la población norteamericana y EEUU entró en la guerra poco después. La Primera Guerra Mundial causó 323.000 muertes norteamericanas. JD Rockefeller ganó alrededor de 200 millones de dólares. Eso es alrededor de 3 mil millones actuales. Sin mencionar que la guerra costó a los norteamericanos alrededor de 30 mil millones de dólares, la mayor parte de los cuales fueron pedidos al Banco de la Reserva Federal con interés, aumentando aún más las ganancias de los banqueros internacionales.
SEGUNDA GUERRA MUNDIAL.
El 7 de Diciembre de 1941, Japón atacó la flota americana en Pearl Harbor, provocando entrada de los EEUU en la II Guerra Mundial.
El Presidente Franklin D. Roosevelt declaró que el ataque fue "un día que vivirá en la infamia". Un día de infamia in lugar a dudas, pero no por el supuesto ataque sorpresa sobre Pearl Harbor.
La información que ha visto la luz pública 60 años después ha puesto de manifiesto que el ataque sobre Pearl Harbor no sólo fue conocido por las autoridades norteamericanas semanas antes, sino que fue deseado y provocado por dichas autoridades.
Roosevelt, cuyos familiares habían sido banqueros desde el siglo XVIII y cuyo tío Fredrik estuvo en la junta de la Reserva Federal original, estaba muy a favor de los intereses de los banqueros internacionales y ese interés era entrar en la guerra. Como hemos visto nada es más beneficioso para los banqueros internacionales que la guerra.
En una anotación de su diario fechada el 25 de Noviembre de 1941, el Secretario de Guerra de Roosevelt, Henry Stimson, documentó una conversación que tuvo con Roosevelt:
“La cuestión era cómo podríamos manipular la situación para que los japoneses fueran los primeros en atacar. Era deseable asegurarse que los japoneses fueran los que atacaran primero, para que no hubiera dudas de quienes eran los agresores”.
Durante los meses anteriores al ataque de Pearl Harbor, Roosevelt hizo todo lo posible para enojar a los japoneses, mostrando una postura de agresión: prohibió todas las importaciones japonesas de petróleo americano, congeló todos los bienes japoneses en los EEUU, hizo públicos prestamos a la China nacionalista y entregó ayuda militar a los ingleses, ambos enemigos de Japón en la guerra lo cual, dicho sea de paso, viola las reglas internacionales de la guerra.
El 4 de Diciembre, tres días antes del ataque, los servicios de inteligencia australianos advirtieron a Roosevelt sobre una fuerza de ataque japonés moviéndose hacia Pearl Harbor. Roosevelt la ignoró. Entonces, como fue deseado y permitido, el 7 de Diciembre Japón atacó Pearl Harbor matando a 2.400 soldados.
Antes de Pearl Harbor, el 83% del pueblo norteamericano no quería tener nada que ver con la guerra. Después de Pearl Harbor, un millón de hombres se ofreció como voluntarios para la guerra.
Es importante destacar que la guerra de la Alemania nazi era ampliamente apoyada por dos organizaciones, una de las cuales era llamada IG Farben. IG Farben produjo el 84% de los explosivos alemanes e incluso el Zyckon B usado en los campos de concentración para matar millones de personas.
Uno de los socios no conocidos de IG Farben fue Standard Oil Company, la compañía norteamericana de J.D. Rockefeller. De hecho, la fuerza aérea alemana no podía operar sin un aditivo especial creado por la Standard Oil de Rockefeller. El drástico bombardeo alemán de Londres por ejemplo, fue posible gracias una venta de 20 millones de dólares de combustible a IG Farben por la Standard Oil Company de Rockefeller.
Este es sólo un pequeño ejemplo de cómo algunas empresas americanas se beneficiaron estando en ambos lados de la Segunda Guerra Mundial.
Otras organizaciones traidoras que merece la pena citar es la Union Banking Corporation de New York. No sólo financió numerosos aspectos del ascenso al poder de Hitler, así como armamento alemán para la guerra, sino que también lavaba dinero nazi.
En sus cámaras acorazadas fueron descubiertos millones de dólares pertenecientes a los nazis. La Union Banking Corporation de NY fue requisada por violación de la ley que prohibía los negocios con los enemigos.
Adivinen quién era el director y vicepresidente de la Union Bank… ¡Prescott Bush, el abuelo del presidente actual de los EEUU!
Acuérdate de esto cuando pienses en las actitudes morales y políticas de la familia Bush.
VIETNAM
Los EEUU declararon oficialmente la guerra a Vietnam del Norte en 1964, a raíz de un supuesto incidente en el que unos destructores americanos fueron atacados por barcos PT de Vietnam del Norte en el Golfo de Tonkin. A este incidente se le conoce como el incidente del Golfo de Tonkin.
Este incidente fue el único pretexto que catalizó el despliegue masivo de tropas y la guerra total. Sin embargo hay un problema: el ataque contra los destructores norteamericanos por los barcos vietnamitas… ¡nunca sucedió! Fue una patraña totalmente inventada como excusa para entrar en guerra.
El Secretario de Defensa Robert McNamara dijo años después que el incidente del Golfo de Tonkin fue un error, mientras muchos otros enterados y oficiales han hecho público que fue una farsa preparada, una completa mentira.
Y de nuevo, como siempre, la guerra fue un buen negocio. En octubre de 1966, el presidente Lyndon Johnson, levantó las restricciones comerciales al bloque soviético, sabiendo muy bien que los rusos estaban suministrando hasta un 80% de las provisiones a los nor-vietnamitas. En consecuencia, los intereses de Rockefeller financiaron fábricas en la Unión Soviética, que los rusos usaron para fabricar equipamiento militar y enviarlo a Vietnam del Norte.
Sin embargo, la financiación de ambos lados del conflicto era sólo una cara de la moneda. En 1985, las Reglas de Compromiso de Vietnam fueron desclasificadas. En ellas está detallado lo que las tropas militares podían y no podían hacer en la guerra. Incluye cosas absurdas como estas: los sistemas de misiles contra aviones no podían ser bombardeados hasta que se supiera que estaban completamente funcionales; no se podía perseguir a ningún enemigo una vez que cruzaran la frontera de Laos o Camboya; y lo más revelador de todo, los blancos estratégicos mas críticos no podían ser atacados a menos que el ataque fuera iniciado por oficiales de alto rango. Aparte de estas ridículas limitaciones impuestas, las autoridades de Vietnam del Norte fueron informadas de estas restricciones, de forma que pudo basar todas sus estrategias sobre las limitaciones de las fuerzas norteamericanas. Fue por eso que la guerra duró tanto tiempo. Y el punto fundamental es este: la guerra de Vietnam nunca quiso ser ganada, sino mantenida.
Esta guerra ocasionó 58.000 muertes norteamericanas y tres millones de vietnamitas muertos.
¿Dónde estamos ahora? El 11 de Septiembre fue el inicio de lo que ahora es una acelerada agenda creada por una elite cruel. El 11-S fue un pretexto para preparar la guerra, como lo fue el hundimiento del Lusitania, la provocación de Pearl Harbor y la mentira del Golfo de Tonkin.
De hecho, si el 11 de Septiembre no fue un pretexto planeado de guerra, sería una excepción a la regla. El 11S fue usado para comenzar dos guerras ilegales no provocadas: una contra Irak y otra contra Afganistán. Sin embargo, el 11-S fue el pretexto para otra guerra.
¡La guerra contra ti!
El Acta Patriota, la Seguridad de la Nación, el Acta de Tribunales Militares y otras legislaciones han sido completa y enteramente diseñadas para destruir tus libertades civiles y limitar tu capacidad de luchar contra lo que se nos viene encima. Actualmente en los EEUU, sin que la inmensa la mayoría de los norteamericanos con el cerebro se den cuenta, tu casa puede ser registrada sin una orden judicial y sin estar tú en ella. También pueden arrestarte sin decirte los cargos, una detención indefinida sin acceso a un abogado. Puedes ser legalmente torturado. Todo bajo la sospecha de que podrías ser un terrorista.
Si necesitas un cuadro de lo que está sucediendo en EEUU reconozcamos cómo la historia se repite a sí misma:
En febrero de 1933, Hitler, en un ataque de falsa bandera, incendió el edificio de su propio parlamento alemán, el Reichstag, y culpó de ello a terroristas comunistas. Algunas semanas después aprobó el Enabling Act, que anuló completamente la Constitución alemana, destruyendo las libertades de las personas.
Después permitió una serie de guerras preventivas, todas justificadas frente al pueblo alemán como necesarias para mantener la "seguridad de la nación".
“Existe un mal que amenaza a cada hombre, mujer y niño en esta gran nación. Debemos tomar medidas para asegurar nuestra seguridad interna y proteger nuestra nación. Nuestro enemigo es una red radical de terroristas y los gobiernos que los apoyan”.
¿George W. Bush?
¡No! ¡Adolf Hitler!
Es hora de despertar.
Los detentores del poder hacen de todo para asegurarse de que estés continuamente distraído y manipulado. La percepción de la realidad que tiene la mayor parte de la gente, especialmente en el terreno político, no es suya propia, sino que les es sagazmente impuesta sin que ellos se den cuenta siquiera.
Por ejemplo, mucha cree en realidad que la invasión de Irak está saliendo mal porque la violencia sectaria no parece detenerse. Lo que el público no alcanza a ver es que la desestabilización de Irak es exactamente lo que quieren aquellos que están detrás del gobierno. Esta guerra pretende ser mantenida para que la región pueda ser dividida, se pueda mantener el dominio del petróleo, se recojan continuos beneficios para los contratistas de la defensa y, lo más importante, se establezcan bases militares permanentes que puedan ser usadas como puentes de lanza contra otros países petroleros no dispuestos a ceder, tales como Irán y Siria.
Para ilustrar que la guerra civil y la desestabilización están siendo intencionalmente provocadas por los invasores, baste este ejemplo: en el 2005, dos comandos ingleses SAS fueron arrestados por la policía iraquí, después de haber sido detenidos cuando conducían un coche desde el que disparaban a civiles. Estos ingleses iban vestidos como los árabes. Después de haber sido arrestados y llevados a la cárcel de Basora, la armada inglesa exigió que liberasen inmediatamente a estos hombres. Cuando el gobierno de Basora se negó, los tanques ingleses irrumpieron en la prisión y se los llevaron por la fuerza.
Si quieres destruir una zona, ¿como lo haces?
Hay dos maneras:
Una: puedes ir y bombardearla, pero eso no es muy eficiente.
Dos: haces todo lo que puedas para lo que la gente de la zona se mate entre ella y destruyan su propio territorio, sus propias granjas.
Esto es lo que se está haciendo en el Oriente Medio. La mejor manera de destruir a un oponente es hacer que se destruya él a sí mismo, dividiendo sus filas y enfrentándolas contra ellos mismos.
Mientras tanto, tú tienes agentes inflamando ambos lados. ¡Que se eliminen entre ellos!
Ya es hora de que despertemos a esta realidad. Tenemos que entender que aquellos que tratan de mantener y de crear imperios, lo hacen manipulando a la gente que tratan de conquistar.
Te preguntarás por qué toda la cultura actual está saturada de medios de entretenimiento masivo por todas partes, mientras que el sistema educativo en EEUU continúa su asombrosa decadencia desde que el gobierno decidió hacerse cargo y subvencionar el sistema educativo público.
El gobierno está pagando porque le interesa obtener lo que está obteniendo.
Para entender esto debemos observar las instituciones educativas financiadas por el gobierno. Nos daremos cuenta de qué tipo de estudiantes y qué tipo de educación son las que están saliendo en estas escuelas financiadas por el gobierno. La lógica te dice que si lo que sale de esas escuelas no es lo que el Estado y el Gobierno federal esperan que salgan entonces el Estado debería cambiar el tipo de educción. Sin embargo, ni el Gobierno ni el Estado están haciendo nada porque están obteniendo lo que quieren obtener. Es decir: no quieren que tus hijos sean cultos, no quieren que piensen demasiado.
Esta es la razón por la que en los EEUU hay tantos entretenimientos, medios de comunicación de masas, shows televisivos, parques de diversiones, drogas, alcohol y todo tipo de diversiones para mantener la mente humana entretenida.
Así que no pienses demasiado y no te metes en el camino de la gente importante.
“Lo mejor es que despiertes y entiendas que hay gente que está guiando tu vida y tu ni siquiera lo sabes.
¡Tenemos un serio problema porque tú y otros 62 millones de norteamericanos estáis escuchándome ahora mismo; porque menos del 3% de ustedes leen libros; porque menos del 15% de ustedes lee diarios; porque la única verdad que conocen es lo que reciben a través del cacharro de la tv. Ahora mismo hay una generación entera que nunca conoció nada que no haya salido de este cacharro. Este cacharro es el evangelio, la última revelación. Este cacharro puede levantar o hundir presidentes, papas, primeros ministros… Este cacharro es la fuerza más fantástica en este mundo sin dios, y nuestra desgracia sería que este poder cayera alguna vez en las manos de gente equivocada. Porque cuando la compañía más grande del mundo controle la fuerza propagandista más poderosa de este mundo sin dios, quién sabe qué mierda se venderá como si fuera verdad en esta cadena televisiva.
¡Así que escúchame, escúchame!
La televisión no es la verdad. ¡La televisión es sólo un maldito parque de diversiones! ¡La televisión es un circo, un carnaval, una tropa de acróbatas viajeros, contadores de historias, bailarines, cantantes, malabaristas, gente rara, domadores de leones y jugadores de fútbol! La TV es el negocio de matar el aburrimiento.
Y tú te sientas ahí día a día, noche a noche, sea cual sea tu edad, tu color, tu creencia… Sólo conoces lo que aparece en este cacharro. Y empiezas a creerte las ilusiones que te proporciona este cacharro. Estás empezando a pensar que este cacharro es la realidad y que tu propia vida es irreal. ¡Estás dispuesto a hacer cualquier cosas que este cacharro te ordene que hagas! Te vistes como el cacharro te enseña, comes, educas a tus hijos como este cacharro te dice que lo hagas. ¡Hasta piensas como este cacharro!
¡Es la locura colectiva! ¡En el nombre de Dios, tú eres real! ¿Acaso somos una ilusión?”
Lo último que los hombres que están detrás de la cortina quieren es un público consciente e informado capaz de tener pensamiento crítico. Por eso un continuo y fraudulento Zeitgeist es emitido por medio de la religión, de los medios de comunicación de masas y por el sistema educativo.
Buscan mantenerte en una burbuja ilusoria. Y están haciendo un maldito buen trabajo.
En el 2005, se firmó un acuerdo entre Canadá, México y los Estados Unidos. Este acuerdo, sin haber sido anunciado a la población, sin ser regulado por el Congreso o los Parlamentos, fusiona de hecho a los Estados Unidos, Canadá y México en una misma entidad, borrando las fronteras. Esta entidad ha sido llamada Unión Norteamericana. Y quizá quieras preguntarte por qué nunca has escuchado hablar de esto. De hecho, hay un sólo reportero que ha oído hablar de esto y ha tenido el coraje de hablar sobre el asunto.
“La política de limites abiertos de la administración Bush y su decisión de ignorar la imposición de las leyes inmigratorias de este país es parte de una agenda más amplia.
El Presidente Bush firmó un acuerdo formal que acabará con los Estados Unidos tal como los conocemos. Y dio ese paso sin la aprobación del Congreso ni del pueblo de los Estados Unidos. Es un tratado del que pocos han escuchado hablar. Fue hecho por muy poca gente, la que se encuentra en la elite del beneficio, la clase inversora. Salvo los trabajadores de este país, ni los políticos, ni las comunidades, asociaciones o ciudades, nadie sabe nada sobre este acuerdo. No se trata de un simple tratado comercial. Se trata de la eliminación total de la soberanía de estos países. El resultado de todo esto será una nueva moneda, el amero”.
“La gente que usa el dólar debe enfocarse en el amero. Nadie está hablando de esto pero creo que va a tener un gran impacto en la vida de todos los que viven en Canadá, estados Unidos y México”.
El amero es la moneda propuesta para la Unión Norteamericana que se está produciendo en estos momentos entre Canadá, los EEUU y México, con el fin de crear una comunidad sin fronteras muy similar a la Unión Europea. El dólar norteamericano, el dólar canadiense y el peso mexicano serán reemplazados por el amero.
La Constitución Norteamericana quedará eventualmente derogada para que este acuerdo pueda cumplirse.
Tal vez pienses que una situación como ésta debería estar en las portadas de los principales diarios. Pero si te das cuenta de que la gente que está de este tratado es la misma que está detrás de los diarios, comprenderás por qué no te dicen lo que no debes saber.
La Unión Norteamericana es el mismo concepto que la Unión Europea, la Unión Africana y la que será pronto la Unión Asiática. Y es la misma gente la que está detrás de todas ellas. Y cuando sea el momento, la Unión Norteamericana, la Unión Europea,
la Unión Africana y la Unión Asiática serán fusionadas, formando las últimas etapas de un plan en el que estos hombres poderosos han estado trabajando durante los últimos 60 años.
UN GOBIERNO MUNDIAL
"Tendremos un gobierno mundial nos guste o no. La única pregunta es si este gobierno mundial será creado por la fuerza o por consenso”.
Paul Warburg,
Consejo de Relaciones Exteriores,
arquitecto del sistema de la Reserva Federal.
“Estamos agradecidos al Washington Post, al New York Times, al Times Magazine y a otras grandes publicaciones cuyos directores han participado en nuestras reuniones y han respetado sus promesas de discreción durante casi cuarenta años. Hubiera sido imposible para nosotros desarrollar nuestro plan para el mundo si hubiésemos estado sujetos a la luz pública durante esos años.
Pero el mundo actual es mucho más sofisticado y está ya preparado para encaminarse hacia a un gobierno mundial. Una soberanía supranacional formada por la elite intelectual y por los banqueros internacionales es sin lugar a dudas preferible a la auto-determinación nacional practicada en siglos pasados”.
David Rockefeller,
Consejo de Relaciones Exteriores.
Un banco, una ejercito, un centro de poder. Y si hemos aprendido algo de la historia es que el poder corrompe. Y el poder absoluto corrompe absolutamente.
Aaron Russo es un cineasta y político. Fue amigo de Nicholas Rockefeller, de la infame dinastía de banqueros y hombres de negocios de los Rockefeller.
Después de mantener una amistad con Nicholas Rockefeller, Aaron dio por concluida la relación, horrorizado por lo que llegó a saber sobre los Rockefeller y sus ambiciones.
“Un día me llamó una abogada conocida mía y me dijo: ‘¿Te gustaría conocer a uno de los Rockefeller?’
Le dije: ‘Claro, me encantaría!’
Nicholas y yo nos hicimos amigos y comenzó a contarme un montón de cosas.
Una noche me dijo: ‘Se va a producir un gran acontecimiento, Aaron. Y a partir de ese acontecimiento vamos a ir a Afganistán. Así podremos poner tuberías desde el Mar Caspio. Después vamos a ir a Irak para llevarnos el petróleo y establecer una base en Oriente Medio Oriente. Después vamos a ir a Venezuela y nos vamos a deshacer de tratar Chávez’.
Las primeras afirmaciones las llevaron a cabo, la de Chávez no.
- ‘Vas a ver a nuestros muchachos buscando en cuevas buscando a gente que nunca van a encontrar’.
Se reía de una Guerra contra el Terror sin enemigos reales.
Me decía que una Guerra contra el Terror nunca puede ser ganada porque es una guerra eterna. De esta forma se puede seguir quitando libertades a la gente sin fin.
Le dije:
- ‘¿Cómo vais a hacer para convencer a la gente de que esta guerra es real?’.
Y me dijo:
- ‘Gracias a los medios de comunicación. Los medios de comunicación de masas pueden convencer a todo el mundo de que es real. Si hablas y hablas de estas cosas una y otra vez, la gente termina por creérselas. ¿Sabes? Esta fue la gente que creó la Reserva Federal en 1913 a través de mentiras. La misma que creó el 11S, que es otra mentira. Gracias al 11S iniciaron la guerra contra el terror y de repente fueron a Irak, que fue otra mentira. Y ahora van a ir a Irán. Una cosa está lleva a la otra y a la otra’.
Yo le dije: ‘¿Por qué estás haciendo esto? ¿Cual es el objetivo de todo esto? Tienes todo el dinero y todo el poder del mundo. Hay gente que está muriendo a causa de todo eso, ¿sabes? Eso no es bueno’.
El me contestó: ‘¿Por qué te preocupas por la gente? Cuídate a ti mismo y cuida a tu familia’.
Le dije: ‘¿Pero cuál es el objetivo último de esta locura?
Me dijo: ‘El objetivo último es colocarle un chip RFID a todo el mundo. Y tener todo el dinero en esos chips y tener toda la información de cada uno en esos chips. Así, si alguien quiere protestar sobre lo que hacemos o quiere oponerse a lo que queremos, no tenemos más que apagar su chip’.”
¡Así es, con un microchips!
En el 2005, el Congreso de los Estados Unidos, con la excusa del control de la inmigración y la llamada guerra contre el terrorismo, aprobó la Ley de Identificación Real, según la cual, se prevé que en mayo del 2008, será obligatorio llevar una tarjeta de Identificación Federal que incluye un código de barras escaneable en el que se almacena toda tu información personal.
Sin embargo, este código de barras es sólo un paso intermedio, anterior al momento en el que la tarjeta sea equipada con un módulo de seguimiento por RFID de VeriChip, que usará radio frecuencia para seguir todos tus movimientos por este planeta. Si esto te suena extraño, debes saber que el chip de seguimiento por RFID ya se encuentra en todos los pasaportes norteamericanos.
Y el paso final es el chip implantado, el cual ya ha sido implantado a varias personas que han sido manipuladas para que los acepten atendiendo a diferentes pretextos.
Una presentadora de tv:
“Tenemos una familia de Florida que son realmente pioneros de un nuevo mundo valiente. Se han presentado voluntarios para ser los primeros en ser implantados con dispositivos de identificación en sus cuerpos”.
Ahora aparece una de estas pioneras en la tv t este es su testimonio:
“Después de 11S estaba muy preocupada por la seguridad de mi familia. No me importa tener algo implantado permanentemente en mi brazo, para que me identifique”.
Al final, todos estaremos atrapados en una red de control monetaria, en la que cada acción que realicemos será reseñada. Y si quieres salirte de la fila, simplemente pueden apagar tu chip. En esta situación, cada aspecto de la vida social girará alrededor de las interacciones con estos chips.
Ésta es la imagen de lo que están preparando y tienes que abrir los ojos para verla: una economía mundial centralizada en la que el movimiento y las transacciones de todos son seguidas y monitorizadas, con todos los derechos individuales eliminados.
El aspecto más increíble de todos es éste: estos elementos totalitarios no serán impuestos a la gente, será la gente misma la que los pedirá. Ya que la manipulación social a través de la generación del miedo y de la división ha separado a los humanos de su sentido de poder y realidad.
Este proceso viene ocurriendo desde hace siglos, si no milenios: religión, patriotismo, raza, riqueza, clase y todas las demás divisiones e identificaciones arbitrarias así concebidas han servido para crear una población controlada, fácilmente maleable por las manos de unos pocos.
Dividir y conquistar es el lema.
Mientras la gente continúe viéndose como separada de los demás, se prestan a sí mismos para ser completamente esclavizados. Los hombres que están detrás de la cortina saben esto. Y también saben que si la gente se da cuenta de la verdad de su relación con la naturaleza y de la verdad de su poder personal, el Zeitgeist fabricado con el que se alimentan colapsará como un castillo de naipes.
El sistema entero en el que vivimos nos enseña que no tenemos poder, que somos débiles, que la sociedad es mala y fraudulenta, repleta de de crímenes y demás. ¡Es todo una enorme mentira!
Somos poderosos, hermosos, extraordinarios. No hay razón por la que no podamos entender quiénes somos realmente, hacia dónde vamos. No hay una razón real por la que el individuo medio no pueda desarrollar completamente su poder. Somos seres increíblemente poderosos.
“Creo que malgasté treinta años de mi vida. Los primeros treinta años tratando de convertirme en algo. Quería ser bueno haciendo cosas, quería ser bueno en el tenis, quería ser bueno en la escuela y en las calificaciones. Todo lo veía desde esta perspectiva: no estoy bien de la manera que soy, pero si me vuelvo bueno haciendo cosas...
Pero un día, me di cuenta de que no entendía bien este juego. Porque el juego era descubrir lo que yo ya era”.
“Ahora, en nuestra cultura, hemos sido entrenados para resaltar las diferencias
individuales. Así que miramos a las personas y lo que vemos es si es “mas inteligente, más tonto, más viejo, más joven, más rico, más pobre...” y hacemos estas distinciones, y las convertimos en categorías y tratamos a las personas de esa manera. Vemos a los demás como separados de nosotros mismos.
Una de las características dramáticas de la experiencia espiritual es estar con otra persona y de pronto ver en lo que se parece a ti, no distinta de ti. Entonces experimentas el hecho de que lo que es esencial en ti, es esencial en mí. Es uno. No hay otro. Todo es uno.
Yo no nací siendo Richard Albert. Nací siendo un ser humano. Fue después cuando me enseñaron la historia de quién soy, si soy bueno o malo, si consigo algo o no… Todo eso se aprende después”.
Richard Albert
“Cuando el poder del amor venza al amor por el poder,
el mundo conocerá la paz”.
Jimi Hendrix
Los viejos intereses chovinistas raciales, sexuales y religiosos, el fervor nacionalista rabioso están empezando a no funcionar. Una nueva conciencia se está desarrollando. Esta nueva conciencia ve la Tierra entera como un sólo organismo y reconoce que un organismo en guerra consigo mismo está condenado.
Bill Hicks solía terminar sus presentaciones así:
“La vida es como un paseo por una noria en un parque de diversiones. Cuando te subes piensas que es real porque así son nuestras mentes poderosas. El paseo sube y baja y da vueltas y vueltas. Tiene emociones, sustos y ves luces y colores. Es muy ruidoso. Es divertido durante un rato. Algunos llevan mucho tiempo dando vueltas y empiezan a preguntarse si eso es real o es sólo un paseo. Otros se han dando cuenta y han regresado. Nos ha dicho: "Oye, no te preocupes. No temas porque esto es sólo un paseo". Y los hemos matado. ¡Cállenlo! ¡Que tengo mucho invertido en este paseo! Cállenlo! ¡Mira mi ceño de preocupación! ¡Mira mi gran cuenta bancaria y mi familia! ¡Esto tiene que ser real!”
Esto es sólo un paseo. Pero siempre matamos a esos tipos buenos que tratan de decirnos lo mismo. ¿Te has dado cuenta? Dejemos a los demonios que sigan libres. No importa porque es sólo un paseo. Y podemos cambiarlo cuando queramos. Es sólo una decisión. Sin esfuerzo. Sin trabajo. Sin ahorros y sin dinero. Sólo una decisión ahora mismo. Entre el miedo y el amor.
La revolución es ahora
Fuente: www.zeitgeistmovie.com
2 comentarios:
Alguien me puede explicar como es que solo el 3% de la moneda de Estados Unidos existe fisicamente y el restante 97% existe basicamente de manera virtual, con cifras concretas?
Sólo me gustaría que esta película y otras, como Loose Change o las de Alex Jones dijeran derechamente quiénes son "ellos", la "elite" de la que hablan y a la que se refería MacFadden o Lindbergh en sus discursos. Obviamente, y es cosas de ver los nombres, son los judíos: Rothschild, Rockefeller, Warburg en lo que se refiere a bancos. En el gobierno desde Zellikow hasta Pearle, Wolfowitz, Fleischer y hoy Emmanuel, Geithner y otros...
DIGAN LAS COSAS POR SU NOMBRE!!!
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